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Tesla planea 'mudarse' a una megaplanta en China para evitar la guerra comercial
La compañía de Elon Musk busca nuevos horizontes para no ser perjudicado por la subida de aranceles impuesta por EE.UU. y el gigante asiático.
Con la intención de evitar las consecuencias de la declarada guerra comercial entre EE.UU. y China, que derivó en un incremento de la presión impositiva sobre sus ventas al gigante asiático, la compañía estadounidense Tesla tuvo que implementar nuevas estrategias. Por eso, planea construir una megaplanta en Shanghái para producir 500.000 vehículos por año.
El anuncio fue realizado por el gobierno de la ciudad china, con lo que confirma la intención de la empresa de Elon Musk de extender su producción fuera de EE.UU., pese a los deseos de Donald Trump, para aumentar su producción y alcanzar más mercados, publicó Bloomberg.
La iniciativa ya había sido esbozada por el propio empresario el año pasado, cuando dijo que trabajaba con el gobierno de Shanghái para avanzar en la producción local y evitar así los aranceles aplicados por China a las importaciones desde EE.UU., que, en el caso de los autos, aumentaron al 40 %, lo que obligó a trasladar ese incremento a sus precios.
En consecuencia, la nueva planta también abaratará los envíos y bajará los costos de los componentes.
Un viejo objetivo
De avanzar la propuesta, Tesla podría concretar la proyección de Musk, quien, en 2016, preveía aumentar su producción de vehículos anuales en su planta de ensamblaje de Fremont (California, EE.UU.) hasta las 500.000 unidades, algo que, hasta el momento, no logró alcanzar.
En el mismo sentido, el empresario también había expresado que iniciar la producción en China le iba a permitir fabricar centenares de miles de vehículos para colocar en el mercado local (en 2017 vendió 14.779 unidades en ese país) y en otras partes de Asia.
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