"Los polacos maman el antisemitismo con la leche de sus madres": Varsovia se retira de una cumbre tras los comentarios "racistas" de Israel

El primer ministro de Polonia, Mateusz Morawiecki, ha anunciado la cancelación de la participación del Gobierno polaco en la cumbre del Grupo de Visegrado (Hungría, Polonia, Eslovaquia y República Checa), que se celebra en Jerusalén el 18 y 19 de febrero, tras los polémicos comentarios de las autoridades israelíes sobre el papel de los polacos en el Holocausto.

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El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, reavivó la discusión sobre el Holocausto en Polonia con declaraciones realizadas en una conferencia sobre Oriente Medio, celebrada el jueves pasado en Varsovia. "Estoy diciendo que polacos cooperaron con los nazis. Conozco la historia y no la encubro", aseveró el mandatario.

Morawiecki llamó el domingo personalmente a Netanyahu para decirle que no asistiría al evento en protesta por sus comentarios. Por su parte, la oficina de Netanyahu afirmó que las palabras del político fueron mal citadas por los medios.

Este lunes, el líder polaco lanzó un ultimátum a Israel, afirmando que si Tel Aviv no se disculpaba por los comentarios, el país se retiraría de las conversaciones. Poco después, el primer ministro checo, Andrej Babis, anunció que la cumbre no se llevaría a cabo sin la participación de Polonia, y que sería reemplazada por conversaciones bilaterales entre las naciones restantes.

"Con la leche de sus madres"

Por su parte, este domingo el ministro interino de Relaciones Exteriores de Israel, Yisrael Katz, se hizo eco de las afirmaciones de Netanyahu en una conversación con el canal i24, poco después de ser nombrado para el cargo. Katz echó más leña al fuego citando al ex primer ministro israelí, Yitzhak Shamir: "Los polacos maman el antisemitismo con la leche de sus madres", y agregó que "nadie nos dirá cómo expresar nuestra postura y cómo honrar a los muertos".

Morawiecki calificó los comentarios de "racistas e inaceptables", emitiendo su ultimátum con el llamado a no dejar el insulto sin respuesta. Además, la embajadora de Israel en Varsovia, Anna Azari, fue convocada por segunda vez esta semana por el Ministerio de Relaciones Exteriores polaco.

Con despreocupación por la decisión de Morawiecki de no participar, Katz inicialmente respondió que "no hay crisis", ya que "el ministro de Relaciones Exteriores asistirá". Sin embargo, con el anuncio de la República Checa, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel respondió confirmando la cancelación: No habrá reunión completa del Grupo de Visegrado. Llegan tres primeros ministros, que mantendrán reuniones con el primer ministro (de Israel)".

Las relaciones entre Israel y Polonia han sufrido tensiones desde que Varsovia aprobó su polémica ley del Holocausto el año pasado, la cual prohíbe implicar al Gobierno polaco en los crímenes históricos del régimen nazi contra los judíos.