El taller cubano que rescata la tradición de los humidores con fines sociales
En la capital de Cuba se celebra estos días el XXI Festival Anual del Habano, la mayor fiesta de los puros de primera calidad del mundo. En esta edición, el evento cuenta con más de 2.000 participantes de 70 países. Los visitantes podrán disfrutar del tabaco más exquisito hecho a mano en la isla caribeña.
El evento comenzó este lunes y finalizará el viernes en el marco de los 500 años de fundación de la ciudad de La Habana.
RT visitó un taller de humidores en el que se pueden fabricar artesanías que han llegado a costar hasta medio millón de dólares. Se trata de elegantes cofres, tallados en madera, que se utilizan para guardar los famosos puros y presentarlos como un producto totalmente auténtico.
"El tabaco cubano está hecho a mano, cada pieza es única", asegura el artesano Ernesto Aguilera, precursor del proyecto Humidores Habana hace varios años.
Además de los humidores de madera, existen otros cofres que incluyen detalles elaborados con metales preciosos, labrados por orfebres que también forman parte de esta iniciativa. Actualmente, sus elegantes obras se encuentran por todo el mundo y forman parte de colecciones privadas de príncipes, presidentes y grandes personalidades.
#XXIFestivaldelHabano | Los organizadores de la XXI EDICIÓN DEL FESTIVAL DEL HABANO informaron que el encuentro lo cubren 200 periodistas de 25 países, y están presentes 227 expositores de 12 países. @Habanos_Oficial@CastroVerrier#Cubapic.twitter.com/wCUa8N5WH3
— ProCuba (@pro_cuba) 18 февраля 2019 г.
Sin embargo, Aguilera asegura que el verdadero éxito radica en el significado del proyecto para decenas de jóvenes. "Yo creo que eso es de lo más importante. Muchachos que tuvieron un pasado complejo y hoy son artistas, son maestros de esta artesanía, y se han convertido en ejemplo para la sociedad."
Pero el impacto social no queda dentro del taller y sus colaboradores. A través de subastas han logrado donar más de cuatro millones de dólares a la salud pública cubana, los cuales serán invertidos en la compra de equipos y medicamentos.
Ernesto Aguilera y su equipo son hoy los mayores exportadores de humidores en Cuba. Han logrado rescatar tradiciones y técnicas manuales casi perdidas en la isla, y, además, se sienten embajadores de la cultura cubana con cada una de sus obras.