La 'Princesa de las Pesas' del deporte ruso

Una niña rusa consigue unas marcas impresionantes en el deporte de la fuerza y establece un récord mundial al levantar más de 60 kilogramos a la edad de sólo 11 años.

La 'Princesa de las pesas' es el nombre que le dieron los medios a Mariana Naúmova por su récord de 62,5 en la modalidad de ‘press’ de banca sin equipamiento especial, el mejor resultado femenino para jóvenes deportistas menores de 14 años, registrado en un campeonato de levantamiento de pesas en Ucrania.

Según Mariana, la afición por las pesas apareció espontáneamente, cuando acompañó a unas competiciones a su padre, Alexánder Naúmov, que es un maestro de este deporte de clase internacional y al mismo tiempo el entrenador personal de la pequeña plusmarquista.

A pesar de los éxitos de Mariana, los médicos advierten que la dedicación a un deporte de fuerza puede ser peligrosa para una frágil niña. “A la edad de 11 años aún no ha terminado la formación del tejido cartilaginoso. Las sobrecargas pueden ocasionar cambios irreversibles”, comenta el pediatra Alexánder Lucki.

Sin embargo, el padre de Mariana explica que lo que la pequeña practica “no es culturismo”. La deportista va al gimnasio dos veces a la semana y el entrenamiento dura sólo una hora, pero durante ese tiempo la chica levanta en total más de 1,5 toneladas de pesas. Toda la actividad de la niña se realiza bajo el control de profesionales para evitar sobrecargas.

Los padres de Mariana suponen que las facultades de su hija se explican por los genes y que sus músculos reciben bien las cargas. Además, es muy persistente a la hora de alcanzar sus objetivos.

Al principio su madre, Olga Naúmova, no compartía la inusual afición de Mariana, pero ahora cree que lo que hace actualmente le puede servir en el futuro. Confiesa que la chica tiene muchas aficiones pero el entusiasmo se le acaba rápido, por eso duda de que su hija llegue a ejercer el deporte profesional.

También el padre considera que Mariana no debería dedicarse al levantamiento de pesas olímpico, pero de todas formas respetará la decisión de su hija.

A su vez Mariana explica que le encanta la halterofilia y que eso no le impide estudiar bien en el colegio. “En las competiciones me gusta el ambiente. La sala que está llena de gente, el podio, la música. Los espectadores que aplauden cada vez que levanto la pesa. ¿A quién no le gustaría eso?”, dijo en una entrevista a un periódico.

Sea cual sea su futuro deportivo, ahora, cuando los logros de esta chica única están registrados en el 'Libro de los Récords de Rusia' y los trofeos apenas caben en su habitación, le queda aún otro sueño: participar en la famosa competición Arnold Classic y conocer a su fundador, el legendario 'Terminator', Arnold Schwarzenegger.