John Pilger: "Si perdemos a WikiLeaks, perdemos todo un estrato de libertad"

El intento de EE.UU. de enjuiciar al fundador de WikiLeaks, Julian Assange, es un asalto a las libertades civiles conducido por una superpotencia que lucha por preservar su dominio, comentó a RT el periodista y documentalista británico John Pilger.

Según sus palabras, lo que le está sucediendo a Assange no es más que la persecución de un hombre que avergonzó a EE.UU. exponiendo al público la brutalidad de Washington en Oriente Medio.

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"EE.UU. ha despertado la ira porque lo que estaba en juego en aquel momento era la superpotencia mundial luchando por mantener su dominio, su liderazgo informático, técnico y cultural. Y WikiLeaks se ha presentado como un obstáculo tremendo. Si perdemos a los Assanges, y no hay muchos de ellos (…), si perdemos los WikiLeaks, entonces perdemos todo un estrato de libertad", argumentó.

"El Estado deshonesto más grande de todos es EE.UU."

Pilger dice que el ataque a WikiLeaks es emblemático para el periodismo en Occidente, que ha traicionado su mandato de ser el perro guardián de los ciudadanos ante las acciones de sus gobiernos "Entregamos un mundo donde se ha abandonado la democracia básica, que se fundamenta en la discrepancia, en el desafío, en rendir cuentas al poder, en revelar, en avergonzar al poder", aseguró Pilger.

Además, el periodista dijo que Assange fue arrestado "por un capricho político" y que su probable enjuiciamiento y encarcelamiento en EE.UU. "abre todo un capítulo para disminuir los principios que surgieron de la Segunda Guerra Mundial, sobre los cuales se basa la Declaración Universal de los Derechos Humanos, muestra lo frágiles que son". 

Las publicaciones de WikiLeaks basadas en la filtración de Manning asestaron un duro golpe a los intentos de EE.UU. de encubrir la "naturaleza homicida de sus guerras coloniales", dijo Pilger. "Hay algún tipo de creencia consensual (...) de que no hacemos este tipo de cosas (...), solo las realizan los Estados totalitarios, los Estados deshonestos. De hecho, es evidente que el Estado deshonesto más grande de todos es EE.UU.", enfatizó.

Este jueves, Assange fue arrestado por las autoridades británicas después de que Ecuador revocara su asilo político y permitiera que la Policía lo sacara a la fuerza de la Embajada del país latinoamericano en la capital británica. 

El periodista fue trasladado de la Embajada de Ecuador a pedido de las autoridades de EE.UU., que solicitaron su extradición. Fue capturado tras permanecer asilado en la sede diplomática durante siete años, y compareció ante un tribunal local. 

Aunque Assange se declaró inocente de no haberse entregado a las autoridades, un juez londinense desestimó los argumentos del activista y lo declaró culpable de evadir la Justicia.

Assange: preso de la verdad 

Además, se suma una acusación de EE.UU. en la cual se sostiene que el fundador de WikiLeaks participó de supuestas actividades informáticas maliciosas junto a una exagente de Inteligencia del Ejército norteamericano, Chelsea Manning, difundiendo documentos secretos en su portal de filtraciones. De esta forma, Assange se enfrenta a cinco años de prisión en caso de ser juzgado y considerado culpable, y ahora está latente su posible extradición. 

El asesor jurídico del fundador de WikiLeaks, Geoffrey Robertson, afirma que "la alegación de que el Gobierno británico no lo va a extraditar a un país con pena de muerte es simplemente un sinsentido".

"El Gobierno de Reino Unido se enfrenta con la ley que no permite extraditar a nadie. Espero que los jueces británicos dispongan de suficiente fe en la libertad de información para descartar esta solicitud de extradición", dijo Robertson.