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Obreros en la catedral Notre Dame de París fumaban en el andamiaje violando las normas de seguridad
El icónico templo de la capital francesa fue devastado por un voraz incendio el lunes pasado.
Algunos de los especialistas que restauraban la catedral de Notre Dame de París infringieron durante su trabajo la prohibición de fumar en el edificio, afirmó este miércoles Marc Eskenazi, portavoz de Le Bras Frères, la empresa que montó los andamios en el emblemático edificio.
"Algunos colegas violaban esta prohibición de vez en cuando y lo lamentamos", señaló a AFP. Eskenazi reiteró que los infractores confirmaron a la Policía que es verdad que fumaron cerca de la catedral, aunque al mismo tiempo descartó que una colilla de cigarrillo mal apagada pudiera provocar un incendio de tal magnitud.
El representante de la compañía reiteró que estaba prohibido fumar en el andamiaje pero admitió que algunos trabajadores hicieron caso omiso de esta regla porque, debido a la gran altura de la catedral, necesitaban mucho tiempo para bajar de los andamios y volver a subir al lugar de trabajo para fumar.
Además, Eskenazi desmintió una versión de los investigadores según la cual la causa del fuego fue un cortocircuito en el mecanismo de un ascensor provisional. De acuerdo con sus afirmaciones, "no hubo ningún problema" en su funcionamiento.
Violaciones de normas de seguridad
Este mismo día, el semanario satírico Le Canard Enchaîné publicó un artículo en el que informó de que la Policía había encontrado siete colillas de cigarrillos cerca de los andamios.
El medio, citado por el portal France 24, indicó también otra violación de las reglas de seguridad. De acuerdo con la normativa, el puesto de seguridad de la catedral debía estar atendido las 24 horas del día por al menos dos funcionarios estatales; sin embargo, Le Canard Enchaîné informa que solo un empleado estaba de servicio de las 8 de la mañana a las 11 de la noche, mientras que por la noche nadie garantizaba la seguridad.
Al mismo tiempo, se precisa que medidas que habrían podido ayudar a extinguir el fuego, como un sistema de aspersores contra incendios, fueron ignoradas por causas estéticas.
El incendio se desató en torno a las 18:50 hora local (16:50 GMT) del pasado lunes en la parte superior del edificio, y los bomberos tardaron más de 14 horas en apagarlo por completo. La estructura de la catedral se salvó de la destrucción, pero el armazón del techo y la aguja central sucumbieron a las llamas.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha prometido reconstruir Notre Dame en cinco años.
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