Imputan por abuso sexual a exobispo argentino que prestó asesoría al papa Francisco

La Justicia de Argentina imputó el jueves al exobispo y asesor del Vaticano Gustavo Oscar Zanchetta por el delito de abuso sexual agravado, presuntamente perpetrado contra dos seminaristas cuando se desempeñaba en tareas religiosas en el obispado de Orán, provincia de Salta, entre 2013 y 2017.

Zanchetta, de 55 años, llegó ayer desde Roma, Italia, a la ciudad de Orán —ubicada al norte de Argentina—, y se presentó en la Fiscalía Penal, aunque se negó a prestar declaración testimonial. La Justicia, además, ordenó la prohibición de salida del país al clérigo y estableció que el próximo 12 de junio sea sometido a una pericia psicológica, según informaron medios locales. 

En diciembre de 2017, tras renunciar al obispado alegando tener "malos vínculos con sus sacerdotes", y a pesar de que las denuncias de abuso ya eran conocidas por la Iglesia, según la prensa local, Zanchetta fue designado por el papa Francisco como consejero en la Administración del Patrimonio de la Santa Sede Apostólica (APSA), por lo que se trasladó a Roma.

El Vaticano investiga a un exobispo argentino por denuncias de abuso sexual

La oficina de la Curia Romana es considerada la 'inmobiliaria' del Vaticano, ya que su función es la administrar las más de 5.000 propiedades que posee ese Estado alrededor del mundo. Sin embargo, en enero de este año, Zanchetta fue suspendido de esas funciones, al comenzar una investigación de la propia comunidad católica en su contra. 

A finales de mayo, en una entrevista con Televisa de México, el Sumo Pontífice reconoció que fue su decisión trasladar al exobispo a la Santa Sede, luego de haberle recomendado hacer un tratamiento psicológico: "Lo hice venir y le pedí la renuncia (de Orán). Bien clarito. Lo mandé a España a hacer un 'test' psiquiátrico", detalló. Además, indicó que Zanchetta era señalado de tener un trato "déspota, mandón", pero aseveró que ese comportamiento "no está probado". 

Las primeras denuncias

Los hechos de los que acusan al exobispo sucedieron, presuntamente, en un seminario creado por el propio Zanchetta, durante el periodo que presidió el obispado en Orán, señala el periódico local El Tribuno.

El imputado se había ido también de la diócesis de Quilmes, en Buenos Aires, por denuncias similares. Sin embargo, esto no impidió que fuese designado por el papa Francisco para un nuevo obispado en 2013.

Asimismo, los sacerdotes que revelaron estos casos fueron trasladados a otras regiones, se presume que a modo de castigo. El nuncio Emil Paul Tscherrig, quien elevó las denuncias, fue removido de su cargo.