El canal internacional
de noticias en español
más visto en el mundo
Ciencias

Un año de odisea marciana

Publicado:
Vivir aislados, sin poder salir siquiera un momento a la calle para sentir el sol o un poco de aire fresco parecen condiciones propias de una condena, pero por increíble que parezca hay gente que se somete a este ambiente opresivo de manera voluntaria.
Un año de odisea marciana

Vivir aislados, sin poder salir siquiera un momento a la calle para sentir el sol o un poco de aire fresco parecen condiciones propias de una condena, pero por increíble que parezca hay gente que se somete a este ambiente opresivo de manera voluntaria.

Los voluntarios son seis varones: tres rusos, un francés, un  italiano nacido en Colombia y un chino. Su encierro en un módulo de aislamiento con comunicaciones limitadas pone a prueba su resistencia psicológica durante 500 días, el tiempo que duraría un viaje de ida, estancia y vuelta a Marte, las tres etapas de este singular experimento.

Los participantes del experimento Mars 500 (“Marte 500” en ruso) ya llevan un año confinados, pero no son los únicos que han intentado replicar las condiciones de un viaje hacia el planeta rojo. Hace más de cuarenta años, el programa espacial soviético estableció un programa similar de carácter secreto. El propio Yuri Gagarin se sometió a encierros herméticos de corta duración antes de convertirse en el primer hombre que voló al espacio en 1961, hito del que se acaban de cumplir 50 años.

El doctor Guerman Manóvtsev, científico adscrito al Instituto de problemas médico-biológicos de la Academia de Ciencias de Rusia, protagonizó un experimento parecido. Corría el año 1967 cuando  Manóvtesv se sometió a un encierro de un año para probar cómo las personas reaccionan a este tipo de aislamiento que recrean las condiciones de un largo viaje espacial.

Guerman Manóvtsev recuerda lo difícil que resulta estar todo ese tiempo recluido en un espacio aislado. “Nosotros en realidad no teníamos las mismas condiciones que en el actual experimento. Éramos tres personas viviendo en 12 metros cuadrados. Pero creo que pasar 500 días encerrado requiere mucho aguante”.

Conscientes de ello, los responsables del programa Mars 500 han dispuesto ciertas comodidades para que el encierro no sea tan duro. Una consola de videojuegos, una guitarra, libros y películas variadas sirven para que los miembros sobrelleven la estancia en el módulo de aislamiento con cierta normalidad. Aunque lo más importante de todo son las relaciones que establecen los tripulantes que comparten la singular nave.

“Nosotros éramos tres y por eso no podía darse una situación de empate cuando teníamos distintas opiniones. Pero como las opiniones de la gente no siempre son las mismas, siempre hay alguien que puede cambiar bando. Creo que ese es el principal problema”, opina Manóvtsev.

Un aspecto muy importante del proyecto Mars 500 es su carácter voluntario. Cada uno de los seis miembros de la tripulación simulada puede abandonar el proyecto cuando quiera, una 'válvula de escape' que contribuye a que el proyecto llegue a buen puerto.

Como asegura Diego Urbina, el voluntario italiano-colombiano que participa en el proyecto Mars 500 como  especialista de la Agencia Espacial Europea, que las personas puedan salirse del experimento cuando lo deseen es básico en este tipo de estudios.

Lo que seguramente une a todos quienes han participado en este tipo de experimentos son las sensaciones: el día que dejen la estación su relación con el mundo exterior ya no será la misma. Como explica Manóvtsev, “el volumen de los objetos cambia y sientes nuevos olores. Muchos, de hecho. También pasa otra cosa extraña, y es que sientes como una especie de borrachera durante una hora que se acaba de repente, una tensión nerviosa que te fatiga rápido”.

Posiblemente los participantes de Mars 500 esas y otras muchas emociones sentirán el  próximo 5 de noviembre, cuando el experimento concluya y todos  puedan regresar a sus lugares de origen. Para entonces, los seis se sabrán ya parte de una experiencia única que supuso una gran aportación para la ciencia con la mirada puesta en conquista del planeta rojo.

La imagen cómica, tomada a bordo de la ´nave cósmica´, muestra a los seis miembros del proyecto Mars 500 en el 30º día del vuelo simulado. Las gafas especiales se utilizan en el experimento que estudia el efecto de la luz azul sobre el régimen del sueño y de vigilia.

comentarios
RT en Español en vivo - TELEVISIÓN GRATIS 24/7