¿Está sentada la OPEP sobre un barril... de dinamita?

La Agencia Internacional de la Energía liberará unos 60 millones de barriles de crudo de sus reservas estratégicas para intentar reducir los precios del petróleo. La decisión fue tomada después de que en la última reunión de la OPEP los países miembros no pudieran llegar a un acuerdo sobre las cuotas de producción.

Los problemas con el suministro internacional fueron provocados por la intervención en Libia, que antes de la operación militar de la OTAN exportaba más de un millón de barriles al día. Ante esta situación, el organismo se dividió en dos bloques, lo que desequilibró las cuotas de producción petrolera y calentó la demanda.

Muchos expertos opinan que esto afecta también a los países exportadores de crudo, ya que contribuye al aumento de la inflación. Sin embargo, el profesor de economía Mario González cree que los miembros de la OPEP están interesados en cooperar con los países consumidores. 

“Una de las estrategias de Arabia Saudí ha sido expandir sus relaciones bilaterales con los países consumidores. Esto es como un preámbulo a la posibilidad de que la OPEP se desintegre. Si Arabia Saudí, que es el primer productor y si Irán, que es el cuarto productor, abandonan la OPEP la organización se desintegra. Pero aunque se desmantele el cartel, los países productores siempre van a velar por sus intereses y siempre van a tratar de acomodarse con los países consumidores. Y creo que hay un interés implícito en cooperar”, afirma González.