Sociedad
Nuevo México podría considerar "alteración de pruebas" el aborto tras violación
Una legisladora republicana del estado estadounidense de Nuevo México, Cathrynn Brown, presentó un proyecto de ley que contempla el aborto en caso de violación como un delito grave de tercer grado por “manipulación de pruebas”.
La legislación propuesta por Brown obligaría a las víctimas de violaciones e incesto a completar su periodo de embarazo para utilizar al niño como prueba en un juicio por agresión sexual.
"La manipulación de pruebas incluirá ayudar o asesorar para el aborto u obligar o coaccionar a otro para someterse al aborto de un embarazo como resultado de una penetración sexual criminal o de incesto, con la intención de destruir las evidencias del crimen", dice el proyecto de ley original.
Después de que los medios de comunicación difundieran esta información, que provocó fuertes críticas por parte de numerosos ciudadanos, Brown eliminó los datos de contacto de su página web y publicó una versión enmendada del documento. Pero en lugar de aclarar la legislación, la nueva redacción resultó ser aún más ambigua: "Las personas que cometen agresión sexual o incesto y las que colaboran para que se realice un aborto después del crimen con la intención de destruir las pruebas de dicho delito, se considerarán culpables de manipulación de pruebas".
Cathrynn Brown, por su parte, aseguró que su intención es únicamente impedir los casos de violación e incesto. “No es la víctima, sino el violador el que sería acusado de manipulación de pruebas”, añadió. De sus palabras se deduce, no obstante, que, según ella, la mujer todavía tendrá que dar a luz para presentar al bebé como 'evidencia' del crimen.
Los demócratas cuentan con la mayoría parlamentaria en Nuevo México, por lo que resulta poco probable que el proyecto de ley sea aprobado.
"La manipulación de pruebas incluirá ayudar o asesorar para el aborto u obligar o coaccionar a otro para someterse al aborto de un embarazo como resultado de una penetración sexual criminal o de incesto, con la intención de destruir las evidencias del crimen", dice el proyecto de ley original.
Después de que los medios de comunicación difundieran esta información, que provocó fuertes críticas por parte de numerosos ciudadanos, Brown eliminó los datos de contacto de su página web y publicó una versión enmendada del documento. Pero en lugar de aclarar la legislación, la nueva redacción resultó ser aún más ambigua: "Las personas que cometen agresión sexual o incesto y las que colaboran para que se realice un aborto después del crimen con la intención de destruir las pruebas de dicho delito, se considerarán culpables de manipulación de pruebas".
Cathrynn Brown, por su parte, aseguró que su intención es únicamente impedir los casos de violación e incesto. “No es la víctima, sino el violador el que sería acusado de manipulación de pruebas”, añadió. De sus palabras se deduce, no obstante, que, según ella, la mujer todavía tendrá que dar a luz para presentar al bebé como 'evidencia' del crimen.
Los demócratas cuentan con la mayoría parlamentaria en Nuevo México, por lo que resulta poco probable que el proyecto de ley sea aprobado.
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