Un 'abuelo' sinvergüenza engaña a los transeúntes

Un hombre disfrazado de anciano les juega una broma a los transeúntes. Un actor disfrazado se para en un paso cebra y pide a los peatones que le ayuden a cruzar la calle. Entre refunfuños, el viejecito dirige a sus víctimas hacia el otro lado de la calle, y cuando están llegando a la acera opuesta se despide y se monta en un Mercedes descapotable en el que le espera una bella joven. Al verlo montarse en el moderno auto y besar a la muchacha, los buenos samaritanos se quedan estupefactos.